Parroquia de Nuestra Señora de la Fuensanta de Fuensanta de Martos
(foto: archivo propio)
Se halla Fuensanta rescostada en un valle de la Sierra Sur de Jaén, junto al río y al manantial que son el origen mismo de su existencia. Justo donde mana el agua desde el interior de la tierra, los moradores del lugar construyeron una fuente, llamada "de la Negra", que sacralizaron colocando una imagen mariana de la Virgen que emerge de las aguas.
Si desde el punto de vista antropológico y de la tradición, esta surgencia de agua es el elemento más apreciado por los fuensanteños, desde la óptica artística y arquitectónica, el bien de mayor valor del municipio lo constituye la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Fuensanta, que posiblemente de forma consciente se construyó en el mismo eje de la fuente, al otro lado del río, también santo, cuyas aguas provenientes de las altas sierras de La Pandera riegan este fértil valle.
El edificio es renacentista, del siglo XVI, y viene a sustituir a una antigua ermita que se situaba junto al manantial citado y que quedó destruida por una riada. Al nuevo templo se trasladó la imagen que se veneraba en la ermita, Nuestra Señora de la Fuensanta, aunque es ésta una advocación que se extendió popularmente de manera errónea, siendo la verdadera la de Nuestra Señora de las Mercedes. Desde su erección, la Parroquia de Fuensanta dependió de la de Santa Marta de Martos hasta el día 1 de Septiembre de 1847 en que alcanzó su independencia, siendo su primer párroco Don José de Córdoba.
La obra carece de alardes estilísticos y es de reducidas proporciones. La planta es rectangular o de salón y presentaba originalmente una sola nave. En el siglo XIX se le añadió otra en el lado derecho o lado de la Epístola, con capillas hornacinas en el muro -siguiendo el ejemplo del paramento opuesto en la nave original-, y separándola de esta última con una serie de arcos formeros apuntados -siguiendo la estética neogótica de la época- que apoyan en sobrias columnas de orden toscano. Se cubre esta nave con bóveda de cañón rebajada, mientras la principal lo hace con techumbre de madera que no obstante queda oculta tras una decoración de estuco. El presbiterio se cubre con bóveda de cuarto de esfera sobre pechinas, decorada al fresco con una pintura que muestra a Dios Padre emergiendo de entre las nubes. A través del retablo mayor, obra contemporánea de escaso valor artístico, se abre un hueco de arco de medio punto que comunica con el pequeño camarín de la Virgen.
Tiene un coro en los pies, elevado sobre la puerta de entrada, y atravesado en su lado izquierdo por el volumen prismático de la torre. Destaca también en el interior una antigua pila baustismal en piedra con una taza de grandes dimensiones, quizás de la misma época que la propia iglesia.
La iglesia se encuentra empotrada entre otras construcciones que la rodean, salvo su fachada principal en los pies, y unos metros de la lateral del lado del Evangelio. Exteriormente, el edificio es muy austero, realizado en buena sillería regular. Tiene dos portadas muy sencillas, una en el lateral mencionado, de arco de medio punto, y otra la principal, más grande, también de arco de medio punto sobre sencillas pilastras que ostenta en su clave una Cruz de Calatrava en relieve, recuerdo de la pertenencia de Fuensanta a esta Orden Militar. Tras una moldura que divide la totalidad de la fachada en dos cuerpos, remata el conjunto un ventanal adintelado. Esta portada aparece descentrada como consecuencia de la ampliación del templo en el XIX, apreciándose el diferente color y disposición de la piedra en el nuevo módulo, ubicándose en él un ventanal alargado y un óculo superior.
El elemento más destacado es la torre, en la esquina entre las dos portadas, que surge del propio cuerpo del templo, superándolo en altura, añadiendo un tercer cuerpo para campanario, aunque éste ya construido en ladrillo. Se abren en él cuatro vanos de arco de medio punto para albergar las campanas, cubriéndose con tejado a cuatro aguas. Sobre el tejado, una pequeña estructura de hierro sujeta otra campana y una cruz-veleta.
Durante el año 2008, la Iglesia sufrió una serie de remodelaciones, especialmente en las deterioradas cubiertas.
Bibliografía:
- VVAA. Jaén, Pueblos y Ciudades. Jaén, 1998.
- VVAA. Guía Artística de Jaén y su Provincia. Sevilla, 2005.
El edificio es renacentista, del siglo XVI, y viene a sustituir a una antigua ermita que se situaba junto al manantial citado y que quedó destruida por una riada. Al nuevo templo se trasladó la imagen que se veneraba en la ermita, Nuestra Señora de la Fuensanta, aunque es ésta una advocación que se extendió popularmente de manera errónea, siendo la verdadera la de Nuestra Señora de las Mercedes. Desde su erección, la Parroquia de Fuensanta dependió de la de Santa Marta de Martos hasta el día 1 de Septiembre de 1847 en que alcanzó su independencia, siendo su primer párroco Don José de Córdoba.
Nuestra Señora de la Fuensanta, o de las Mercedes, titular de la Parroquia y patrona de la Villa
(foto: archivo propio)
Tiene un coro en los pies, elevado sobre la puerta de entrada, y atravesado en su lado izquierdo por el volumen prismático de la torre. Destaca también en el interior una antigua pila baustismal en piedra con una taza de grandes dimensiones, quizás de la misma época que la propia iglesia.
Interior del templo parroquial. Naves principal y lateral
(foto: archivo propio)
Altar y Retablo Mayor
(foto: archivo propio)
Dios Padre. Pintura al fresco de la bóveda del Presbiterio
(foto: archivo propio)
Pila bautismal de piedra. Interior del templo parroquial.
(foto: archivo propio)
La iglesia se encuentra empotrada entre otras construcciones que la rodean, salvo su fachada principal en los pies, y unos metros de la lateral del lado del Evangelio. Exteriormente, el edificio es muy austero, realizado en buena sillería regular. Tiene dos portadas muy sencillas, una en el lateral mencionado, de arco de medio punto, y otra la principal, más grande, también de arco de medio punto sobre sencillas pilastras que ostenta en su clave una Cruz de Calatrava en relieve, recuerdo de la pertenencia de Fuensanta a esta Orden Militar. Tras una moldura que divide la totalidad de la fachada en dos cuerpos, remata el conjunto un ventanal adintelado. Esta portada aparece descentrada como consecuencia de la ampliación del templo en el XIX, apreciándose el diferente color y disposición de la piedra en el nuevo módulo, ubicándose en él un ventanal alargado y un óculo superior.
El elemento más destacado es la torre, en la esquina entre las dos portadas, que surge del propio cuerpo del templo, superándolo en altura, añadiendo un tercer cuerpo para campanario, aunque éste ya construido en ladrillo. Se abren en él cuatro vanos de arco de medio punto para albergar las campanas, cubriéndose con tejado a cuatro aguas. Sobre el tejado, una pequeña estructura de hierro sujeta otra campana y una cruz-veleta.
Durante el año 2008, la Iglesia sufrió una serie de remodelaciones, especialmente en las deterioradas cubiertas.
Fachada lateral del templo
(foto: archivo propio)
Torre campanario
(foto: archivo propio)
Fachada principal de la Iglesia
(foto: archivo propio)
Bibliografía:
- VVAA. Jaén, Pueblos y Ciudades. Jaén, 1998.
- VVAA. Guía Artística de Jaén y su Provincia. Sevilla, 2005.
Preciosa entrada Jesús, las fotografías son impresionantes amigo. La parroquia por fuera es muy bonita, y por dentro... espectacular. La Señora tiene unos ojos divinos, alegres... son muy expresivos, tiene la carita llena de paz. Gracias amigo por esta maravilla.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo desde el blog de la Tertulia Cofrade Cruz Arbórea.
http://tertuliacofradecruzarborea.blogspot.com/
P.D.: Gracias por quedarte por el blog de la Tertulia amigo; y me ha gustado mucho la procedencia de tus abuelos.